Adéntrate entre las paredes de la bodega más antigua de Valencia, el Celler, para degustar los mejores vinos de la provincia mientras te encuentras en uno de los lugares más emblemáticos del Barrio del Carmen.
Te proponemos varias vivencias especiales: la visita a la bodega; la cata de vinos y degustación de embutidos y productos artesanos de la tierra; y la posibilidad de celebrar eventos particulares de empresa y jornadas grupales con multitud de opciones a la carta.
Regalar una experiencia enológica nunca había sido tan facil.
A continuación te explicamos cómo reservar tu tarjeta regalo para regalar a quien tú quieras.
Ponte en contacto con celler@proava.org y te ayudamos a decidir la mejor opción.
La tarjeta se puede canjear durante 90 días desde la fecha de emisión.
Una jornada sugerente. Desde el año 2007, PROAVA y el IVVSA pusieron en valor este singular espacio, restaurándolo con especial mimo para mantener intacta su alma e inmenso valor histórico. El resultado es un lugar que evoca más de 800 años de historia y cuya restauración ofrece a sus visitantes dos niveles de experiencia sensorial y audiovisual en una recreación completamente inmersiva que se puede acompañar con catas y degustaciones.
Eventos con encanto. No más de 20 personas (límite del aforo que garantiza un completo deleite y razón de la reserva previa) pueden disfrutar simultáneamente de una visita cultural, sendas catas de vino, presentaciones, degustaciones y toda clase de actividades de empresa, celebraciones, actos, asambleas o jornadas.
El Celler Medieval de Valencia es una de las experiencias más enriquecedoras y evocadoras que pueden tenerse en toda la ciudad. Y un acierto para aquellos actos privados que busquen sorprender y enamorar, mientras un buen vino de la tierra hace el resto.
Opciones para grupos sábados por la tarde y domingos por la mañana.
Durante las obras de construcción de unos edificios entre las Plazas del Árbol, Centenar de la Ploma y la calle Baja, el golpe de un pico abrió un hallazgo sin precedentes: una bodega medieval que había esperado nada menos que ocho siglos a ser descubierta. Una verdadera cápsula del tiempo cuyo sensacional estado de conservación facilitó su inmediata consideración como bien patrimonial de primer orden.
Este descubrimiento arqueológico ha devuelto a la vida uno de los periodos más significativos de la historia de Valencia, aquel en que Jaime I “el Conquistador” tomó la ciudad a los árabes para anexionarla después a la floreciente Corona de Aragón en 1238.
El Celler Medieval fue una de las primeras construcciones que alojó el Barrio del Carmen. Entre sus paredes, y durante más de 200 años, se almacenó, elaboró y vendió la quintaesencia de la dieta Mediterránea tal y como la conocemos hoy día: cereal, aceite y vino (cereal, olivo y vid).
La bodega mantuvo su actividad hasta bien entrado el siglo XV. En adelante pudo haber sido un comercio o una taberna — uno de los muchos misterios que aún encierran sus muros —. Lo cierto es que en la actualidad es uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad del Turia.
El Celler es un lugar donde el tiempo pasa volviendo hacia atrás.