El proyecto de BBVA y El Celler de Can Roca para promover la cocina sostenible y dar visibilidad a los pequeños productores de todo el país vuelve en septiembre y, para este mes, contará con un vino valenciano: Parotet 2019 del Celler del Roure. En esta ocasión, Joan Roca ha elegido «algunos de los mejores productos de su despensa personal para compartir con el público en general por medio de fáciles recetas», destacan los responsables de la iniciativa en un comunicado.
El cochinillo es el ingrediente principal de la primera de las propuestas: una carne de cerdo ibérico criado en libertad en la dehesa extremeña por País de Quercus. Para acompañar este plato, el chef catalán recurre a las patatas de Prades, para elaborar una fácil terrina. Remata el plato una ensalada de berros y rúcula de Biòrica e higos murcianos de Frutas y Verduras Rodríguez.
La segunda receta de este mes consiste en unos raviolis de pepino cortado en crudo y relleno de queso cremoso de Formatges Bauma. El plato de pasta vegetal se completa con una salsa de pistacho de Les Garrigues. El vino Parotet 2019 del Celler del Roure, elegido por Josep Roca, pone el broche de oro de la propuesta de este mes. Un tinto juvenil de vieja cultura mediterránea con DO Valencia y elaborado con variedades olvidadas, fermentadas y criadas en tinajas históricas.
Uno de los objetivos del proyecto es resaltar las cualidades y posibilidades de un producto de temporada. Para el mes de septiembre, los hermanos Roca han querido destacar las bondades del pistacho, un producto considerando muchas veces un mero aperitivo pero con muchas posibilidades en la cocina.
Los frutos secos, recalcan, son «unos productos fundamentales dentro de una alimentación saludable». En concreto, el pistacho se considera uno de los alimentos más nutritivos y beneficiosos para el organismo. Alimento cardiosaludable fantástico, especialmente por su alta cantidad de grasas buenas, aporta proteínas vegetales que ayudan a aumentar las defensas.